El domingo 24 de julio de 2022 la Iglesia universal celebra la II Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores. Los abuelos y las personas mayores constituyen un valor y un don tanto para la sociedad como para las comunidades eclesiales.
La Jornada propone un gran encuentro que una la experiencia de los mayores y la esperanza de los jóvenes, la sabiduria de la edad y el vigor de los que crecen, aquellos que tienen mucho a decir i aquellos que lo quieren saber todo, una alianza entre generaciones, que quede reflejada por el abrazo fraternal a los ancianos.
CUAL ES EL MENSAJE DEL PAPA?
El lema escogido para esta celebración es “En la vejez seguiran dando fruto” (Sl 92,15).
«La sensibilidad especial de los ancianos por las atenciones, los pensamientos y los afectos nos hace más humanos y deberia de volver a ser una vocación para muchos. Es un acto de amor de los más mayores hacia las nuevas generaciones. Es nuestra aportación a la revolución de la ternura, una revolución espiritual y pacífica, a la que os invito, queridos abuelos y ancianos, a que seáis protagonistas», dice el Papa.
CON QUÉ INDICACIONES PASTORALES PODEMOS TRABAJAR LA JORNADA?
PREPARÉMONOS PARA UNA PASTORAL DE LARGO PLAZO
La Jornada propone no sólo un encuentro puntual sino una orientación pastoral a largo plazo: “la atención a los abuelos y ancianos no puede ser una cosa extraordinaria, porque su presencia no es excepcional, sino una hecho establecido en nuestras sociedades. El Papa nos invita a tomar consciencias de su relevancia en la vida de nuestros países y comunidades y a hacerlo no de manera episódica, sino estructural, es decir, no se trata de perseguir una urgencia, sino de poner las bases de una pastoral a largo plazo que nos compromete durante décadas», dijo el Cardenal Kevin Farrell en la presentación de la Jornada.
Enriquezcámonos con la lectura de las catequesis del Papa sobre la Ancianidad que han precedido la Jornada y con el documento de la Subcomisión episcopal familia y vida «La ancianidad: riqueza de frutos y bendiciones».